Probablemente una de las mejores obras de teatro que haya visto jamás.
Con Asier, todo es posible. Actor, cantante, un interprete en estado puro.
En esta ocasión nos acerca a la historia de su niñez. Un niño vasco, autista, que canta y habla solo en su habitación, reclamando atención y cariño. Se rodeaba solo de sus amigos invisibles, soñando ser lo que hoy es, un actorazo de los pies a la cabeza.
Acompañado de una magnífica banda de música y de la mano de la Compañía Factoría Madre Constriktor, pasarás más de dos horas cantando y bailando sin parar. Estar sentado en la butaca, es casi imposible.
Su historia y su forma de transmitirla te harán reír y llorar, y no podrás resistente a enamorarte de él, y de su forma de hacerte sentir como espectador.
Grande Asier !!! Gracias por hacernos soñar....Vuelve pronto!!!
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